Audrey Kawasaki es una artista y pintora reconocida por sus distintivos retratos llenos de erotismo y sensualidad. Sus obras en su mayoría son pinturas al óleo pintadas directamente en tablas de madera, y su estilo ha sido catalogado como fusión de Art Nouveau y Manga japonés.
Según declaraciones personales de Audrey, la blancura de los lienzos "la intimida" y prefiere trabajar sobre bases más sobrias, texturadas y no tan brillantes. Corta y moldea los paneles de madera a mano o con láser, o trabaja directamente sobre la plancha sin alterar su forma natural. Temas como la sexualidad, la feminidad, el erotismo, la mitología redundan en sus obras.
La gran mayoría de los personajes de Audrey son mujeres sin una edad específica, acompañadas de diversos elementos, como flores, insectos, anatomía humana, animales y la decoración típica del Art Nouveau. La mirada cansina, la nariz pequeña y los labios voluptuosos son razgos característicos de las mujeres que pinta.
Sus personajes expresan melancolía y nostalgia con un aire etéreo de seducción, en muchos casos asociadas a elementos macabros, como calaveras, esqueletos humanos y de animales, fantasmas, seres mitológicos.